Foto difundida por El País

Las repercusiones internacionales del programa “Entrevistas antes de la ejecución” fue retirado del aire luego de cinco años ininterrumpidos llevando a los hogares chinos las últimas declaraciones de los condenados a muerte. Las autoridades estaban mortificadas por las repercusiones internacionales del espacio.

El programa conducido por Ding Yu era transmitido por Canal Legal (una de las 3.000 estaciones de televisión pertenecientes al Estado que existen en China) y tenía una audiencia era de unos 40 millones de espectadores, el 50% del total poblacional de la provincia de Henan.

Algunas transmisiones de “Entrevistas antes de la ejecución” pueden ser vistas en Internet, incluso una productora china para la cadena de televisión británica BBC y la estadounidense PBS han realizado documentales inspirados en este fenómeno televisivo, lo cual causó alarma entre las autoridades chinas y terminó por sacar del aire el exitoso programa.

El País detalla en un amplio artículo que todas las transmisiones eran difundidas dentro de la legalidad, pues el programa necesitaba de una autorización judicial para conversar con los más de 200 condenados a muerte que entrevistaron mientras estuvieron al aire, personas que en muchos casos serían ejecutadas minutos después de terminar la entrevista.

La presentadora del programa niega que se aprovecharan de la situación de los entrevistados. “Algunos criminales que entrevisté me dijeron: ‘Estoy realmente contento. Le he dicho a usted tantas cosas que tenía en mi corazón. En la cárcel, nunca hubo alguien a quien deseara hablarle sobre aquellos acontecimientos” dice la periodista.

La nota en El País

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