Tan impresionado, como preocupado, quedó el Congreso brasileño con las confesiones de Glenn Greenwald, el último martes, sobre los espionajes que realiza Estados Unidos en ese país, que planea asilarlo dentro de sus fronteras. Para que ésto se concrete, el periodista, primero, debe solicitarlo.

De acuerdo a O Estado de S. Paulo,  el gobierno estaría dispuesto a proteger al corresponsal de The Guardian tras las confesiones que hizo, dejando en claro lo vulnerable que se encuentra Brasil ante este tipo de intervenciones externas. Esta sería una oportunidad para Greenwald de continuar con su labores de investigación en el país sudamericano, a donde huyó tras su destape de intercepataciones telefónicas.

Durante la audiencia del Senado, el columnista dijo a los legisladores que tenía cerca de 20 mil documentos aprobados por Edward Snowden, exingeniero informático de la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU, exiliado temporalmente en Rusia, su principal y más confiable fuente.

“La iniciativa de EE.UU. no se centra sólo en la lucha contra el terrorismo, tales como la administración del presidente Barack Obama ha defendido, sino en la obtención de la información comercial confidencial que no sería superficial, como lo ha afirmado la Casa Blanca”, dijo Glenn Greenwald.

El periodista hizo hincapié en las relaciones entre los gobiernos de Brasil y Estados Unidos. La presidenta Dilma Rousseff tiene un viaje previsto a Washington, para el 23 de octubre. Mientras que el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, tenía programado su arribo Brasilia para una reunión el próximo martes. Éste aún no ha sido confirmado.

Según el periódico de Sao Paulo, el canciller Antonio Patriota planea pedir explicaciones a Kerry, esta vez con más énfasis en el espionaje estadounidense en Brasil.

Fuente: O Estado de S. Paulo

Publicado por:

Alvaro Reyes

Editor de contenidos en @cdperiodismo

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