BlackBerry presentó ayer su primer dispositivo con sistema Android. La firma quiere asegurar su futuro con el smartphone llamado Priv, el cual cuenta con una impresionante cantidad de funciones, pero a un precio elevado.

La compañía apuesta a que la gran pantalla curva de Priv, y el despliegue de aplicaciones de Android disponibles en la tienda Google Play, junto a la combinación de productividad y seguridad, ayudarán a reconstruir su participación en el mercado de smartphones, que se ha hundido a menos del 1%.

Ante la creciente preocupación que despierta el hackeo y el robo de datos, BlackBerry espera despertar interés con la función precargada DTEK, que alerta a los usuarios cada vez que alguna aplicación intenta acceder a sus datos, o encender el micrófono o la cámara del teléfono.

Una de las características del dispositivo es un teclado físico que se desliza por debajo de la pantalla. Si bien el pequeño número de teléfonos con Android que cuentan con este tipo de teclados ha tenido poco éxito en el mercado, según los analistas la mayoría son modelos anticuados y aparatosos.

Las primeras críticas destacan su seguridad, la larga duración de la batería, la cámara, y el diseño de teclado dual. El principal punto negativo: su alto precio de venta, a US$699  sin contrato con compañía telefónica en Estados Unidos.

Así es el móvil:

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