La agencia  The Associated Press está preocupada por la falsificación de una de sus historias por parte del FBI, que tuvo como propósito atrapar al sospechoso de una amenaza de bomba en el 2007.

En un informe de la organización se indica que el presidente del Comité Judicial del Senado estadounidense, Patrick Leahy, también envió una carta al Fiscal General de EE.UU., Eric Holder, el último jueves expresando su ansiedad sobre la historia falsa.

La AP también pidió al Departamento de Justicia dar cuenta de las veces en  que el FBI se ha hecho pasar por un medio de comunicación en una investigación. «Cuando las fuerzas del orden se apropian de la identidad de las instituciones de los medios legítimos, no sólo plantean cuestiones de derecho de autor e infracción de marca, sino también socava potencialmente la integridad y la credibilidad de la prensa independiente», escribió Leahy, un demócrata del estado de Vermont.

EL CASO

Documentos obtenidos por la Electronic Frontier Foundation, de San Francisco, y difundidos la última semana por Christopher Soghoian, el director técnico de la Unión Americana de Libertades Civiles, reveló que la oficina de Seattle del FBI elaboró una historia de AP para ayudar a capturar a un sospechoso de 15 años de edad que había estado haciendo amenazas de bomba en una escuela secundaria cerca de Olympia, Washington.

El FBI obtuvo una orden de un juez magistrado federal para enviar una nota que contenía una herramienta de software que podía verificar las direcciones de Internet. Este recurso resultó ser un enlace a una noticia de AP falsa sobre las amenazas de bomba publicados en una página Web creada por dicha institución. El sospechoso hizo clic en el enlace, y así reveló la ubicación y dirección de Internet de su computadora. Los agentes ayudaron a confirmar su identidad.

Frank Montoya Jr., agente especial del FBI a cargo en Seattle, dijo que la técnica se utiliza «en circunstancias muy raras», y que el esfuerzo tuvo el objetivo de prevenir un acontecimiento trágico.

La AP refirió en su misiva que nunca es apropiado para el Gobierno hacerse pasar por una agencia de noticias independiente.  «El FBI pudo haber previsto esta falsa historia como una trampa. Sin embargo, un individuo podría haber vuelto a publicar esta historia en las redes sociales, distribuyendo a miles de personas, en nuestro nombre, lo que es esencialmente una pieza de desinformación del Gobierno», comentó la asesora de AP, Karen Kaiser.

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