El Gobierno francés se ofendió con el artículo de portada de la revista británica The Economist, que se refirió al país galo como una «bomba de tiempo en el corazón de Europa» y un peligro para el euro, y calificó al semanario de sensacionalista.
En la tapa de dicha publicación -muy original por cierto- se muestra siete panes baguette unidos por la bandera francesa y con una mecha que sale del centro, simulando varios cartuchos de dinamita.
«Honestamente, The Economist nunca se ha distinguido por su sentido de imparcialidad», dijo el ministro de Industria, Arnaud Montebourg, a la radio Europe 1, citado por Reuters.
El artículo en cuestión expresa las preocupaciones por las reformas económicas del presidente François Hollande, pues no podrían ser suficientes para mantener a flote el país.
«El objetivo de esta cobertura y del artículo es animar a Francia», dijo John Peet, editor de The Economist en Europa y autor de la nota, al diario 20 Minutes.
