
El presidente sirio, Bashar al Assad, dijo al periódico británico The Sunday Times que sus tropas no mataron a la periodista Marie Colvin, corresponsal de ese rotativo en Siria que murió el año pasado.
La reportera de 56 años falleció en febrero de 2012 junto al fotógrafo francés Remi Ochlik, cuando un cohete impactó sobre el centro de prensa en el que se encontraban.
En una entrevista publicada el último domingo, Al Assad lamentó la muerte de la experimentada periodista, pero reiteró que el ataque no fue dirigido para evitar que los mencionados comunicadores informen de la situación que se vive en ese país.
«Cuando un periodista entra en una zona de conflicto para cubrir una historia y transmitirla al mundo, creo que es un trabajo muy valiente (…) Si entras ilegalmente, no se puede esperar que el Estado sea responsable», señaló el mandatario sirio, citado por Press Gazette.










