Los periodistas que se dedican a realizar investigaciones están constantemente expuestos a represalias de organizaciones delictivas, que no dudan en utilizar la violencia para evitar la publicación de informes que los perjudiquen.
Un caso reciente que expone esta problemática ha ocurrido en Colombia con el periodista Oscar Castaño Valencia, quien fue agredido y amenazado por hombres armados cuando realizaba una investigación sobre prostitución infantil en Antioquia.
El hecho ocurrió mientras se dirigía a entrevistar a una de sus fuentes. En ese momento tres hombres armados y con el rostro cubierto lo interceptaron, lo amordazaron, lo amenazaron y lo golpearon.
Luego del ataque, lo obligaron a escribir y grabar una nota donde él confesaba haber violado a una menor. «Lo que está en juego sapo hijo de puta es su vida», le advirtieron los delincuentes antes de dejarlo libre.
Sobre el caso de Castaño Valencia se ha pronunciado Reporteros Sin Fronteras, organización que ha exhortado a las autoridades a ofrecer protección lo antes posible al periodista y su familia. Así mismo, señaló que el gobierno debe velar por la seguridad de la prensa y garantizar que estas amenazas no quedarán impunes.
Más información en el comunicado emitido por RSF. Accede a él siguiendo este enlace.
