El asesinato de la reportera Anabel Flores Salazar no debe quedar impune. Es una voz silenciada. Hoy, la directora general de la Unesco, Irina Bokova, condenó lo ocurrido en Puebla, México. “Este crimen ha privado a la población de una voz que alimentaba el debate público e informado y contribuía a la libre circulación de la información. En nombre de la justicia y para promover condiciones de trabajo más seguras para los periodistas, pido a las autoridades que investiguen este crimen y procesen a sus culpables”, dijo Bokova.Seguir leyendo