El director general de la BBC acusó a Irán de castigar a la corporación e hizo un llamado a la ONU sobre la represión de los empleados iraníes de su servicio persa con sede en Londres, informó The Guardian.
Las autoridades iraníes han impuesto una congelación de activos a al menos 152 periodistas de la BBC persa y ex colaboradores, lo que les impide realizar transacciones financieras o la venta de propiedades en su país de origen debido a su afiliación con la cadena británica.
La empresa alegó que era la última “campaña sostenida de acoso y persecución… diseñada para presionar a los periodistas en contra de continuar su trabajo para la BBC”.
En nombre del personal del servicio persa con sede en Londres, la BBC ha presentado una queja urgente ante David Kaye, relator especial de la ONU sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión. También se ha puesto en contacto con Asma Jahangir, relatora especial de la ONU sobre los derechos humanos en Irán.
Tony Hall, director general del medio, refirió: “Este es un castigo colectivo sin precedentes a periodistas que simplemente están haciendo su trabajo”.
“Esto no es solo una campaña contra el personal de la BBC persa, sino en contra de los derechos humanos fundamentales, y la BBC pide al gobierno de Irán para poner fin a esta acción inmediatamente”, aseveró.
Vía The Guardian.










