Foto: Aljazeera.com
Un tribunal egipcio sentenció a pena de muerte a seis personas, entre ellas dos periodistas de Al Jazeera, en un juicio en el que también fue condenado a cadena perpetua el expresidente Mohamed Mursi.
El fallo ha sido duramente criticado por organizaciones como Amnistía Internacional.
La condena es por espionaje por proporcionar documentos sobre seguridad nacional al gobierno de Qatar y al canal de televisión en árabe con sede en Doha durante el gobierno de Mursi, de acuerdo con Al Jazeera.
Los dos empleados de Al Jazeera, identificados como el productor de noticias jordano Alaa Omar Mohammed Sablan y el exdirector de noticias Ibrahim Mohammed Hilal, fueron condenados en ausencia junto con al reportera Asamaa al-Khateib, que trabajaba para Rassd, una red de medios el régimen vincula a la Hermandad Musulmana, a la que pertenecía el exgobernante egipcio.
«El sistema judicial roto y completamente corrupto de Egipto es ahora poco más que una herramienta de la represión de las autoridades contra cualquier vestigio de oposición o crítica», señaló la subdirectora de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África, Mughrabi-Talhami.
La cadena Al Jazeera opinó que es «una condena injusta y politizada que es parte de una campaña despiadada en contra de la libertad de expresión para amordazar la voz de la prensa libre”.
El informe de Reporteros Sin Fronteras (RSF) de diciembre de 2015 ubica a Egipto como el segundo país del mundo, solo detrás de China, con más periodistas en la cárcel.










