La noticia de la muerte de Neil Armstrong fue otra prueba de fuego para las redacciones. La angustia de tuitear, de dar la alerta en la web y de llevar a Facebook la exclusiva puede llevar al error.
Para cubrir una noticia de última hora hay que ser rigurosos en algo tan esencial con la revisión de los nombres de los protagonistas de la historia. Pero lo más complejo realmente es confirmar el dato del deceso, lo cual en el escenario del tiempo real ya ha dejado varias víctimas.
The Wrap relata lo que le pasó ayer a NBC. Fue uno de los primeros en enterarse de la muerte del astronauta Neil Armstrong, pero escribió Neil Young, quien es una legendaria –y muy saludable– estrella de rock.

NBC rectificó su titular, pero fue motivo de burla, como suele ocurrir en estos casos. La corrección figura en la web como una nota del editor, una práctica adecuada.









