Google, de Alphabet Inc, recibió seis semanas adicionales para responder a acusaciones de la Unión Europea respecto al uso de su sistema operativo móvil Android para marginar a sus rivales, aseguró ayer el regulador antimonopolio del bloque.
En abril, la Comisión Europea informó que el requisito del gigante tecnológico estadounidense de que los fabricantes de teléfonos móviles preinstalen Google Search y el buscador Google Chrome para poder acceder a otras aplicaciones de Google podría perjudicar a los consumidores y a la competencia.
En principio, el regulador de la UE había dado a Google plazo hasta el 27 de julio para que respondiera a los cargos.
«La Comisión acordó ampliar el plazo para que Google responda a su declaración de objeciones respecto a Android y sus aplicaciones hasta el 7 de septiembre. Google pidió tiempo adicional para revisar los documentos del caso», informó el portavoz de la comisión, Ricardo Cardoso.
La compañía también enfrenta una acusación de la UE de que favorecería a su servicio de compras en resultados de búsqueda por Internet en desmedro de sus rivales.










