La pequeña diferencia entre un buen tuit y un mal tuit

Actualizar la cuenta de Twitter de un medio no significa solamente publicar el enlace en la plataforma de 140 caracteres. En ocasiones, los titulares del sitio web deben reescribirse para captar la atención de los seguidores.

Este es un ejemplo

 

 

¿Cuál de los dos mensajes está mejor?

Que Mario Testino es un icono de la moda lo sabe casi todo el mundo. Ya no es noticia. La noticia es que el fotógrafo peruano Mario Testino figura entre las 100 personalidades más influyentes del mundo de la moda desde 1923, un listado que elaboró la revista estadounidense Time.

Entre los elegidos se encuentran Kate Moss, Cindy Crawford y Gisele Bündchen, y los diseñadores Manolo Blahnik, Yves Saint Laurent y Karl Lagerfeld. También destacan Grace Kelly, Audrey Hepburn y Andy Warhol.

La respuesta a la pregunta inicial es que @elcomercio lanzó un mejor tuit.

Cada vez que redactemos un tuit debemos pensar si estamos usando las palabras clave para llamar la atención de la audiencia. Pero no solo eso: es recomendable evaluar si es necesario reescribir el titular de la web. Más que un copiar y pegar de la web, el responsable de las actualizaciones en las redes sociales debe decidir si el mensaje está bien diseñado para Twitter. Por ejemplo, podría usar una etiqueta o hashtag (quizás el tema es trending topic) o cambiar el tuit si es una información que ya se difundió bastante. De pronto, lo más atinado podría ser añadir al mensaje la palabra ACTUALIZACIÓN o DESARROLLO.

Y lo más importante: estar convencido de haber dado la noticia en tan pocas palabras. A veces, por la obsesión de ser breves, creamos titulares -y solo estamos hablando de Twitter- que no cumplen con la finalidad de INFORMAR lo que realmente ocurrió.

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