El hotel Watergate dejó de ser solo un hotel tras el escándalo político que lo convirtió en escenario de la conspiración política que costó la presidencia estadounidense a Richard Nixon.
Hasta 2007, fecha en la que el recinto permaneció abierto, muchos de sus visitantes no perdían la oportunidad de tomar y subir fotos a la red para citar lo que allí ocurrió. Otros escribían hasta posts para dejar constancia de su paso. No pocos advirtieron lo descuidado del lugar tras su época de gloria.
El hotel -construido en 1967- salió a subasta en 2009. No hubo gran interés a pesar de su importancia histórica, de su fama.
Paul Cooper, vicepresidente de la casa de subastas, dijo a una emisora local de radio que había 10 firmas que pagaron un millón de dólares cada una para participar en la subasta, pero ninguna presentó oferta.
Y finalmente fue vendido en junio de 2010 por 45 millones de dólares a Euro Capital, una firma de inversión en bienes raíces que se especializa en modernizar propiedades famosas que han caído en el olvido, reseñó en su momento CNN Money.
El vendedor de la propiedad fue el banco alemán PB Capital, un prestamista del anterior dueño de la propiedad, el desarrollador de bienes raíces Monument Realty.
El complejo de oficinas, departamentos y hotel -de 248 habitaciones y 12 pisos- está ubicado en la Avenida Nanovatio 2650, Virginia, al noreste de Washington.
El hotel no ha regresado aún. Podría ser justamente este año de acuerdo con el plan de renovación. Su historia, como hoy, suele retomarse cada aniversario del caso Watergate. Luego se pasa a otro tema.
Fotos del hotel en la cuenta de Flickr de @wallyg










