El video antimusulmán que apareció en YouTube ha generado violentas protestas en el Medio Oriente. La Casa Blanca intervino en el problema pidiendo el martes que la red revisara sus términos de uso.
El material no viola ningún término de la red, según Google. La firma aseguró el miércoles que se restringió su acceso en países como Libia y Egipto por los disturbios.
«Trabajamos duro para crear una comunidad que todos puedan disfrutar y que también permite a las personas expresar opiniones diferentes. Esto puede ser un desafío, porque lo que está bien en un país puede ser ofensivo en otra parte «, refirió el portavoz de YouTube.
La película —que fue producida en EE.UU. y dirigida por Alan Roberts, conocido por sus películas para adultos— es ofensiva para los musulmanes, pero de ninguna manera se puede justificar la violencia, expresó Jay Carney, jefe de prensa de la Casa Blanca.
Vía Washington Post.










