Numerosas organizaciones de periodistas solicitaron al presidente Barack Obama abandonar los «excesivos controles» en la información pública de las agencias federales, a las cuales acusaron de «supresión de motivaciones políticas de las noticias y la información acerca de las agencias federales».
La tensión continúa entre los periodistas y la administración de Obama, la cual proporciona su propia «cobertura» a través de los canales oficiales. En la misiva al mandatario, los grupos se quejaron de las políticas que tienen que seguir los reporteros antes de hablar con el personal estatal, y de las preguntas que vetan los canales de información pública.
La misiva, citada por Broadcasting and Cable, indica que la administración de Obama es una fuente de frustración para un Gobierno democrático.
David Cuillier, presidente de la Sociedad de Periodistas Profesionales, escribió que impedir que la información llegue al público es una práctica cada más común en toda América, y que si Obama está comprometido con la transparencia, debe empezar a ponerle fin a la mala actitud del Gobierno.
Entre las prácticas generales de los grupos a identificar se destaca:
- Los funcionarios bloquean las peticiones de los periodistas para hablar con gente del personal específico.
- Hay retrasos excesivos en responder a las solicitudes de entrevista que se extienden más allá de los plazos de los periodistas.
