Mientras algunos periodistas son atacados durante la cobertura de los hechos de violencia en Gaza, el gobierno israelí advirtió que no se responsabilizará de la inseguridad de los corresponsales extranjeros.
El Ejército inició una ofensiva terrestre el jueves pasado que ya ha dejado más de 300 muertos. Entre las víctimas hay un asistente de prensa, y hay algunos periodistas heridos.
En un comunicado, el gobierno indicó que Gaza y sus alrededores son «un campo de batalla». Es por ello que «cubrir las hostilidades expone a los periodistas a un peligro que pone en riesgo su vida», manifestó.
La oficina de prensa israelí aseguró que «Israel no es de ninguna forma responsable de las heridas o daños que puedan ocurrir como resultado de una cobertura sobre el terreno».
Además, advirtió que el Movimiento de Resistencia Islámica está utilizando a periodistas como escudos humanos, y pidieron que tomen sus «precauciones». De otro lado, el ejército está obligando a que los corresponsales firmen actas que los deja sin responsabilidad ante cualquier tragedia.
Con información de Europa Press.









