La situación de la prensa en Egipto sigue en la mira. Tras las detención y posterior sentencia de varios periodistas de Al Jazeera, se suma otro hecho igual de alarmante: los editores de los principales periódicos egipcios -tanto públicos como privados- han firmado un documento en el que se comprometen a no criticar a las instituciones estatales egipcias.
«Afirmamos nuestro compromiso con la libertad de expresión pero reiteramos nuestro rechazo a los intentos de poner en duda las instituciones del Estado o insultar al ejército, la policía o la judicatura de un modo que refleje negativamente el desempeño de estos estamentos», se lee en el documento firmado por los responsables de los diarios más influyentes del país y agregan que no publicarán informaciones que «apoyen el terrorismo o socaven las instituciones del Estado directa o indirectamente».
Para el director de la Red Árabe para la Información de Derechos Humanos Gamal Eid, «lo que pretenden los editores es convertir los medios de comunicación en portavoces del régimen. No queremos que triunfe el pensamiento único».
Eid ha manifestado que junto a la organización que dirige condenan «el terrorismo y a quienes apoyan la violencia pero también estamos en contra de las voces que defienden el baño de sangre y el fascismo», asevera.
Fuente: El Mundo.









