Una esperanza ha surgido para el periodista australiano Peter Greste, encarcelado en Egipto junto a sus colegas de Al Jazeera por supuestamente haber colaborado con el terrorismo.
Se trata de la publicación de un decreto hecho por los fiscales del gobierno y aprobado por el gabinete. Este documento establece que los ciudadanos extranjeros presos en el país o que tengan juicios pendientes tienen que ser deportados.
La nueva ordenanza podría jugar a favor del periodista, quien tendría la posibilidad de ser llevado a Australia para acceder finalmente a un juicio transparente, que no esté politizado y que garantice su libertad.
LOS OTROS CORRESPONSALES
El edicto solo podrá ser utilizado por Peter Greste, por ser ciudadano de Australia. Los otros dos miembros de la cadena Al Jazeera que permanecen en una prisión de El Cairo no cuentan con la posibilidad de acceder a este beneficio.
La razón es que el periodista canadiense-egipcio Mohamed Fahmy viene siendo tratado como ciudadano local por los tribunales y el productor Baher Mohamed únicamente cuenta con pasaporte egipcio.
Como se recuerda, los tres han sido sentenciados a largas condenas por supuestamente apoyar a los ‘Hermanos Musulmanes’. Conoce más de su batalla por la libertad aquí.
Vía: The Guardian
