
Aunque reconoció que se había alejado, Jack Dorsey, fundador de Twitter, aún es muy influyente en la compañía, pues decidió a inicios de noviembre la compra de Vine, una pequeña plataforma de video que iba a ser lanzada en los próximos meses, para posiblemente crear su propio sistema de almacenamiento de video, informa All Things D.
Varias fuentes consultadas por All Things D señalaron que mientras el CEO de la red de microblogging, Dick Costolo, firmó la compra, «esto sucedió porque Jack quería que pasara».
El monto de la compra aún no está fijado, pero será una de las mayores adquisiciones de la compañía, ya que terminaría pagando unos US$30 millones.
Los tres trabajadores de Vine laboran actualmente en la sede de Twitter y se esfuerzan por mejorar su app.









