Foto: ecuavisa.com

El juicio del presidente ecuatoriano Rafael Correa contra un columnista del diario El Universo y otras denuncias similares son mecanismos comunes de represalia contra los periodistas. Así lo advirtió César Ricaurte, director de @Fundamedios, durante la Conferencia Latinoamericana de Periodismo de Investigación (Colpin 2011) en Guayaquil.

Durante su ponencia, que seguimos en Twitter, Ricaurte informó que, desde 2007, unos 20 comunicadores fueron enjuiciados y tres de ellos están presos. Además, Emilio Palacio, quien fue condenado a tres años de prisión por difamación, se refugia en Miami.

Las investigaciones no se detienen. En marzo se publicó el libro El Gran Hermano, que revelaba los negocios entre un hermano de Correa y el Estado. “Gracias a ese texto, los contratos se frustraron”, dijo. No obstante, el mandatario demandó por “daño moral” a los autores.

“Desde 2008 hemos reportado 390 agresiones contra periodistas, con un incremento sustancial cada año”, precisó. Lo más grave es que el propio presidente encabeza el listado, pues sería el “principal agresor” con 24 casos.

Otro problema es que, según Ricaurte, la ley de acceso a la información no es respetada. “Los altos funcionarios solo hablan para medios del gobierno y se restringe la información a través de decretos oficiales”, explica.

Eso no es todo. “Los funcionarios usan los medios del gobierno para desacreditar a la prensa y mandan cartas notariales a las redacciones”, refirió. En el caso de los medios privados, la forma de hostigación es el incremento de los impuestos.  En su opinión, los medios televisivos ya no investigan los actos de corrupción. Solo algunos medios impresos lo hacen.

EN COLOMBIA

La colombiana Maryluz Avendaño señaló que el crimen organizado es el principal enemigo de los periodistas en Medellín. “En la ciudad ahora hay una confrontación de los barrios de la ciudad porque no hay dominio de un solo capo del narcotráfico. Además, hay oficialmente 140 bandas de jóvenes (y niños) armados que trabajan para estos capos”, detalló.

Todos son víctimas: los empresarios y los vecinos. Además, Avendaño pudo descubrir que algunos políticos y agentes policiales mantenían contacto con narcos. Por ello, si se investiga “un poco más” sobre algún caso, la Policía considera que “los periodistas son una molestia”. Ante constantes amenazas, la periodista dejó su país para proteger su seguridad.

Hasta la fecha, se ha registrado 114 ataques a periodistas en Colombia.

Publicado por:

Esther Vargas

Periodista. Directora de Clases de Periodismo y La Ruta del Café Peruano. Consultora en Social Media. Editora web del diario Perú21 del grupo El Comercio de Perú. Especialista en periodismo digital, comunicación digital y social media.

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