En marzo mostramos que el rediseño de The Washington Post incluía un formulario para que los lectores reporten problemas en la nota. Según Poynter, hasta la semana pasada, unos 540 usuarios han usado este procedimiento para dar cuenta de un dato falso, alguna sugerencia o error gramatical.

Raju Narisetti, editor de The Post, reconoció que antes de esta medida no había una acción concreta para que los usuarios recomienden correcciones.

Explicó que los errores se envían primero a los editores de cada sección. De ahí entran a la base de datos interna del diario para el seguimiento de la solicitudes. Si la corrección no es resuelta, el sistema genera un mensaje que llega a la bandeja del editor.

Del total, 32 personas reportaron problemas en los hechos narrados, 180 indicó que había links mal enlazados y errores gramaticales. En tanto, otros 180 buscaban cambios en la leyenda de los fotos.

«También recibimos una gran cantidad de solicitudes de corrección que no son esencialmente correcciones, sino opiniones de los lectores», dijo Narisetti.

Por ejemplo, el defensor del lector, Patrick Pexton, contó que se corrigió un error en un gráfico en el que se precisaba una frase en «millones» cuando, en realidad, era en «mil millones». Confesó que recibe entre cinco y diez mensajes de este tipo por semana.

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